Picos del Águila y el Chinar desde Redován

Si nos gustó esta sierra subiendo desde Callosa, más nos ha gustado subiendo desde Redován. Gracias a la recomendación de Rubén a quién conocimos este verano en La Alcazaba (Sierra Nevada) hemos decidido subir al pico del Águila desde Redovan y os puedo asegurar que es una ruta impresionante. Muchas gracias Ruben por señalarnos este camino tan interesante.

Parece mentira con qué poco se puede hacer un sendero, si es que se puede llamar así, puesto que esta ruta transcurre en gran parte sobre roca pura y con una pendiente tal, que en muchos tramos nos obliga a ayudarnos con las manos o a afianzarnos en cables prudentemente colocados para atravesar los pasos horizontales.

Da gusto ver cómo cuidan la montaña por aquí. El camino estaba limpísimo y muy bien señalizado, pintado con marcas de sendero en blanco y verde.

La ruta transcurre así:
Salimos de Redován, del aparcamiento que hay junto a un depósito de agua y una piscina en la falda de la montaña. Comenzamos a subir por un sendero dejando la rambla a nuestra izquierda al principio y a nuestra espalda al poco de empezar a andar. En esta zona hay que llevar especial cuidado en seguir el track porque la zona está plagada de senderos que se atajan y podríamos desviarnos. Recordad que durante la ascensión, nosotros seguimos las marcas blanca y verde no las blancas y amarillas.

Caminamos al principio ente pinos, bajo la inmensa pared del pico del Águila y apenas transcurridos unos 250 m, nos encontramos con un desvío con pronunciada pendiente anunciándonos lo que nos vamos a encontrar durante el camino. Caminamos a veces por rastros de sendero y a veces sólo siguiendo las marcas sobre la piedra como rumbo general el ESE alternando con ENE en las subidas más francas.

Llegamos a un pequeño mirador desde el que las vistas son espectaculares, en realidad lo son en todo momento, porque la pendiente es muy fuerte y el terreno muy agreste. Aquí comenzamos a girar en dirección NNO unos 650 m donde realizamos un giro de unos 100º a la derecha para dirigirnos hacia la divisoria. Una vez pasados al otro lado de la cuerda, pero muy cerca de esta, llegamos a un paso sobre una losa plana con pendiente (lo que se llama un “malpaso”) que está asegurada con una maroma gruesa de material no muy adecuado para interperie. En realidad la maroma no es necesaría, es más bien un quitamiedos, ya que te puedes sujetar con las manos a la roca sin ningún riesgo. No obstante es preferible tener precaución en este tramo, especialmente si la roca está mojada porque puede haber algún resbalón sorpresa.

Después de la maroma, apenas andados unos metros ya vemos abajo el refugio y tras unos pocos pasos más, el vértice geodésico del pico del Águila (566 m). Aquí aprovechamos para tomar un refrigerio y recobrar fuerzas, porque la subida aunque corta, es muy intensa. Una vez repuestos, caminamos por la cuerda en dirección NO hacia el pico del Chinar que en todo momento está a la vista y esto hace el rumbo inequívoco.

El pico de el Chinar (518 m) se encuentra a unos 1,7 km del pico del Águila, más bajando que subiendo, caminando siempre por la cuerda, aunque con algunos pequeños repechos. Desde allí continuamos bajando, todavía por la cuerda, hacia el cruce con el sendero del collado del Lobo. Al poco el terreno va mejorando progresivamente. Una vez llegados al cruce, tomamos el ramal de la izquierda hacia el barranco Lisa de La Pinada hasta llegar a un cartel indicador de varias direcciones. A este punto también lo llaman aquí collado del Lobo, pero el punto geográfico del collado se encuentra realmente un poco más al norte.

 Nosotros tomamos camino hacia abajo (Unión variante III cueva de Ahumada) pues bajar es lo que nos proponemos. Durante el regreso, ya por un sendero decente, atravesamos varias zonas de escalada y vamos caminando en dirección SE, dejando el pueblo abajo a nuestra derecha hasta que cercanos a la última zona de escalada hacemos un fuerte giro a la derecha y al poco de cruzar la rambla junto a la que habíamos comenzado la jornada, bajamos hasta el aparcamiento.

La ruta es inmejorable, no te permite un respiro, hay que mantenerese alerta todo el tiempo para ver las marcas y no perder el camino pero también para no dar un traspiés. No la recomiendo a quién tenga vértigo o no esté acostumbrado a caminar por zonas rocosas sin sendero, porque aunque trepada lo que se dice trepada no hay, sí hay que poner muchas veces las manos para poder continuar el camino.

En fin, una experiencia extraordinaria que sin duda pensamos repetir. Esta ruta es muy recomendable. Pongo la calificación de "dificil" no porque tenga ninguna dificultad en concreto sino para no confundir a los que sólo suelen caminar por senderos de tierra bien marcados o tengan algo de vértigo.

Podéis ver la ruta y bajar el track en Wikiloc aquí:
http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=11322659

Y como siempre, para ver mejor las fotos haced clic sobre una de ellas y podréis verlas más cómodamente, a mayor tamaño y todas seguidas. Aunque esta vez las fotos son muy malas porque las tuvimos que hacer con el teléfono.


Espero que os guste.
Buen camino.
Malpaso.